Decía el brillante Billy Wilder en sus consejos para los nuevos cineastas: “Agárralos por el cuello y no los sueltes nunca”. Como escritor y guionista que dio el salto a la dirección, sabía mejor que nadie que un buen guion y una buena narrativa son vitales para mantener al público enganchado desde el minuto uno.
Cada vez son más los juegos que incorporan elementos cinematográficos y reducen las distancias entre ambos mundos. Los hay que dejan la jugabilidad en un segundo plano, son los mal llamados pelijuegos (¡hola David Cage!), otros consiguen con su músculo gráfico y su narrativa acercarse y simular al celuloide casi a la perfección (el espectacular modo Kurosawa de Ghost of Tsusima o Red Dead Redemption 2). También tenemos de vez en cuando pequeñas sorpresas y alegrías que son reivindicaciones a los videojuegos, ofreciendo narrativas únicas en este medio, algo que consigue “unpacking”
Con una premisa sencilla y un estilo gráfico simple pero a la vez cuidado nos cuenta una historia y nos habla de sus personajes y sus vidas sin mediar palabra, sin cinemáticas, casi sin texto y sin siquiera llegar a ver o manejar a nuestra/o protagonista, curioso, ¿Verdad?

Cuando empezamos el juego se nos presenta un álbum de fotos, tendremos que elegir un nombre. Se mostrará una fecha, esta funde a negro y directamente veremos una habitación y unas cajas. Tendremos que abrirlas e ir ubicando los diferentes objetos que hay en ella por la habitación. Cuando terminemos pasaremos la página del álbum. Se mostrará una fecha posterior a la inicial, fundirá a negro y nos encontraremos en otra habitación con más cajas. Pasaremos por casas con más estancias, siempre con la misma mecánica de las cajas.
No necesita una voz en of que nos explique qué pasa o quien somos, no es relevante, tampoco necesita un avatar con el que identificarnos. Si tenéis cierta edad y habéis pasado por diferentes mudanzas seguramente conectéis con el juego antes de alguien que no haya vivido ninguna. Unpacking es un viaje a través de la vida de nuestro/a protagonista, a través de sus objetos que nos hablan de alguien a quien nunca llegamos a manejar, de sus gustos y de sus inquietudes. Porque no necesitamos que nos cuenten quien es o qué le gusta, simplemente observando y trasteando sus pertenencias lo descubriremos.

Con un estilo gráfico minimalista pero cuidado al milímetro, una banda sonora que acompaña a la perfección y unos efectos muy cuidados, “unpacking” se sitúa como una grata sorpresa y una reivindicación de una narrativa alternativa que nos hará pasar un par de tardes la mar de entretenidas. Si tienes Gamepass es casi obligado pasar por él, sino, si lo ves con una rebajita no dudes en darle una oportunidad.